Municipio logra controlar los gastos, manteniento los servicios a la ciudadanía.
(VEGA BAJA – Lunes, 15 de abril de 2019) A pesar de la crisis fiscal del gobierno central y los recortes a los municipios, Vega Baja ha sido consistente en mantener su disciplina fiscal desde que Marcos Cruz Molina asumió la jefatura municipal.
«Para el 2012, cuando la mitad del año fiscal correspondió a la andministración anterior, el déficit presupuestario fue de $1,849,612 y ya para el 2013 lo habíamos bajado a $877,860. Conforme a lo planificado, para el cierre del 2014 terminamos con un superávit de $1,539,286, que aumentó en el 2015 a $2,693,905 y en el 2016 a $2,232,903», explico el Alcalde.
Ya para el primer año de este cuatrienio, los recortes impuestos por el gobierno central tuvieron su efecto en las finanzas de los 78 municipios pues la cifra se estima en $350 millones menos para este cuatrienio. «Ha sido un reto monumental, ya que con los recortes también están las imposiciones de pagos al Sistema de Salud Estatal y el Sistema de Retiro Estatal. Para el 2017 cerramos el año con un superávit de $1,577,052, que aumentó en el 2018 a $1,881,051», detalló Cruz Molina. Para este año fiscal, que cierra en junio 30, los números se informarán públicamente, como en años anteriores.
«Trabajamos en el documento escrito, como es de rigor, y también hacemos una presentación a la ciudadanía en general, para que conozcan qué es lo que se hace con cada dólar que se recibe en el Municipio», añadió el Alcalde. En el más reciente informe el Contralor, emitido en febrero pasado, se destacó que para el 2011, el exalcalde y alcaldesa interina, formalizaron dos contratos por $5 millones, para construir una plazoleta, quioscos, estación de bombeo sanitario, edificio de emergencias médicas y otras instalaciones en la playa de Puerto Nuevo sin planificar fuentes de financiación necesarios para su terminación.
Cruz Molina argumentó que uno de los retos más grandes al llegar a la administración en el 2013, fue poner en orden las finanzas y resolver entuertos dejados por la administración anterior. «Nos ha tomado años ir enderezar el barco y llegar a los resultados que tenemos hoy. Ese proyecto de la Playa de Vega Baja lo vamos a terminar de manera satisfactoria, de la misma manera que lo logramos con el edificio que nos dejaron en la Carretera #2, esquina Muñoz Rivera en el centro urbano y lo reconceptualizamos y hoy tenemos la Escuela de Bellas Artes Adrián Santos Tirado, orgullo de nuestro pueblo».